Tras leer uno par de artículos de estudios sobre la conciencia y la mente (abarcando un campo más extenso que el expuesto a continuación) me ha llamado la atención particularmente unas partes concretas del mismo que me resultan bastante interesantes por sus connotaciones hacia partes del mundo del misterio pudiéndose resumir en lo siguiente.
Tanto El estudio realizado por Rick Strassman (publicado en 2001) en la Universidad de Nuevo Mexico con DMT (Dimetiltriptamina) como el hecho por Benny Shanon (publicado en 2002) profesor de Psicología en la Universiada Hebrea de Jerusalén sobre las experiencias alucinatorias inducidas por la ayahuscas, plantean la siguiente duda tras sus experimentos ¿Porqué mientras 10 personas diferentes que asisten a un mismo evento en el mundo “real” ofrecen 10 versiones diferentes del mismo y cuando 10 personas diferentes a los que se le suministra ayahusca tienden a describir experiencias similares indistintamente de la geografía, cultura o creencias?
Así se pueden marcar dos pautas repetidas en la mayoría de los casos que son la visión de entidades mitad humanas mitad animal (teriantropso, donde los reptil-humano eran los más naturales) y el encuentro con humanoides inteligentes de piel gris, cabeza enorme de lágrima y ojos oscuros (revisión palpable, desde las pinturas rupestres donde aparecen seres característicos de este estereotipo y crónicas antiguas sobre visitantes hasta las experiencias de abducidos) implantándole trozos de metal o cristal en su cuerpo. Strassman propone que contrariamente a que los alucinógenos interfieran con el cerbero creando falsas percepciones, más bien parece que pueden cambiar las longitudes de onda de la recepción del cerebro, permitiendo establecer contacto con “los mundos invisibles y su habitantes”, inalcanzables en un estado de conciencia normal.
Todos vemos las mismas cosas porque tenemos la misma neurología, no tendríamos alucinaciones idénticas, sino que estos seres existirían de verdad en mundos paralelos a los que tenemos acceso. Los Aliens no serían más que los gnomos, elfos y demonios de otras épocas. Aunque los experimentos realizados han sido hechos con el suministro de sustancias “alucinógeneas” de manera controlada, queda claro que el cerebro tiene recursos suficientes (hormonas, neurotransmisore…..) que en momentos de estrés, depresión ect.. pueden reproducir crisis en que tengamos dichas experiencias de manera “natural”.
Los últimos avances sobre el estudio de la mente se encaminan hacia la conciencia, su existencia, la localización de la misma y su función en, o más allá del cuerpo, planteándonos como en el caso visto, nuevas preguntas que aún son difíciles de contestar pero que al igual que en el caso expuesto, situaciones repetitivas y experiencias parecidas por gente de distinta condición, cultura y localización lleva a decir a los espertos que, las experiencias místicas, los trances chamánicos y las ECM son el mismo fenómeno, la conciencia que se separa del cuerpo, inducidos por distintas vías o padecido en distintos contextos. E incluso que es posible escapar de la realidad cotidiana porque, según la Física Cuántica, no es más que una proyección de le mente (¿la Conciencia?).
Puntos de vista y cuestiones que abren un campo de debate para cada cual, creo yo que interesante planteándonos algunas experiencias relacionadas con el misterio desde otra prespectiva.
Para saber más:
http://luxveritatem.wordpress.com/2011/05/31/dmt-la-molecula-espiritual-el-asiento-del-alma/
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