viernes, 23 de marzo de 2012

Argán (Arganda Espinosa).

Árbol capaz de arraigar y proveer de frutos en las condiciones más difíciles convirtiéndose en símbolo de las culturas Bereber y Amazigh denominando al aceite que extraen como “El Oro líquido de Marruecos”.

En 1998, la UNESCO declaró Reserva de la Biosfera le región del suroeste marroquí donde crece mayoritariamente el Argán, alrededor del Parque Nacional de Souss-Massa al sur de Agadir. Ingrediente esencial en la dieta y medicina de la cultura amazigh además de ser fuente de alimento para el ganado e incluso combustible.

El Aceite de Argán posé propiedades cosméticas, medicinales y nutritivas. La toma de sus semillas (tostadas o no) resulta estimulante, su aceite rico en ácido oleico y linoleico, antoxidantes naturales, vitamina E, ácidos grasos no saturados, ácido telúrico, carotenoides, alcoholes triterpénicos y esteroles y polifenoles entre otras sustancias.

Combate el envejecimiento de la piel (hidrata, rejuvenece y da brillo) así como otras afecciones cutáneas (arrugas, acné, eczemas, neurodermitis, psoriasis, quemaduras, cicatrices..), tiene gran popularidad como aceite para masajes siendo óptimo en el alivio del dolor articular, cosméticamente es bueno para las uñas y cabello (robustece y da brillo), regula el colesterol malo, algunos estudios realizados incluso propones que su consumo continuado podrís reducir hasta un 50 % el riesgo de desarrollar hipertensión.

Para saber más:

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