En este mes tras mis lecturas habituales, me he llevado alguna sorpresilla y me he encontrado con datos, testimonios y planteamientos que me han hecho reflexionar y escribir estas líneas.
Una de las mayores sorpresas me la he llevado con un artículo sobre unas charlas dadas en el Aula Magna de la Facultad de Psicología de la Universidad de Granada en pasado 20 de Marzo del 2012 bajo el título “Alcance de la Consciencia: estudio científico de las experiencias PSI”, siendo de carácter docente (creo que la primera vez en España) con un valor de 0,5 créditos de libre configuración para todos los alumnos que asistiesen, terminando siendo un éxito de asistencia (y permanencia en ella), el organizador del evento fue Oscar Iborra Doctor de Psicología, las distintas charlas y debate fueron impartidas por José Miguel Pérez Navarro Doctor en Psicología por la Universidad de Greenwich (Reino Unido) que ejerce en la Universidad Internacional de la Rioja, Alejandro Parra, Doctor de Psicología por la Universidad de Ciencias Empresariales u Sociales de Argentina y actual presidente de la Parapsychological Association, Francisco Tornay Mejías Doctor en Psicología y profesor Titular del Departamento de de Psicología Experimental y Fisiología del Comportamiento y Manuel Castillo Garzón, Doctor en Medicina y Catedrático de de Fisiología de la misma Universidad de Granada. Conferencias de alto rigor y dentro de los ámbitos académicos a pesar de que los temas tratados son normalmente denostados en estas esferas (aunque fuera de España no tanto, como ya indica José Miguel Pérez Navarro por su propia experiencia en el Reino Unido).
Para saber más:
http://oscar-iborra.blogspot.com.es/2012_03_01_archive.html
Pero la verdadera sorpresa fue descubrir que, la Parapsicología es reconocida como una disciplina científica en su nomenclatura Internacional para los campos de la Ciencia y Tecnología por la UNESCO con el código 6110, dentro de la psicología (código 61), habiendo sido aceptado este reconocimiento por el Ministerio de Educación Español desde 1975. Así que cualquier estudio en este ámbito puede ser considerado científico (siempre que guarde un protocolo adecuado). Otra cosa es el tema Paranormal, que engloba un compendio más amplio de temáticas y donde por desgracia hay mucho “para anormal”, que como es natural desacredita a otros que de manera más seria intentan abordar dichos temas.
Según la RAE:
Parapsicología:
1. f. Estudio de los fenómenos y comportamientos psicológicos, como la telepatía, las premoniciones, la levitación, etc., de cuya naturaleza y efectos no ha dado hasta ahora cuenta la psicología científica.
Para saber más:
http://es.wikipedia.org/wiki/Unesco
http://es.wikipedia.org/wiki/Parapsicolog%C3%ADa
http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=parapsicolog%C3%ADa
http://estigia.tripod.com/parapsicologia.html
Esto, junto al reconocimiento de la UNESCO, acredita que los estudios de mucha gente con alta titulación y bajo un riguroso método elaborado en función de la casuística estudiada preservando los valores del Método Científico puedan ser considerados dignos, y que muchas veces si sus hipótesis no llegan al grado de tesis, es quizás, porque no se ha desarrollado la tecnología necesaria para realizar las mediciones que precisan, pero que son por consiguiente igual de válidas que la contraria al no poderse demostrar ninguna de las posturas por falta de resultados cualitativos.
Creo que hay que comenzar a separar los estudios de un Médico o un físico con varios doctorados que tras 20 o 30 años de ensayos, estudios multidisciplinares (en compañía de otros colegas) y aglutinamiento de información de testigos o practicas sobre el terreno, llegan a pronunciar una tesis sobre un hecho que puede catalogarse de “paranormal” o “parapsicológico”, de aquellos que les aparece un círculo en el sembrado, dicen que eso es una prueba irrefutable de que existen extraterrestres y encima te quieren cobrar 20,00 € por enseñarte el campo. Estos últimos son tan deleznables para mi, como los “escépticos” que a veces, con apenas un Diplomatura sacada por los pelos (el que la tenga, y que a veces no tiene que ver nada el tema tratado) se ensalzan como defensores de la Verdad Científica y menosprecian estudios sin ni siquiera habérselos leído, sólo porque tratan una temática que ellos consideran NO CIENTIFICA por que sí, y no “les interesa” (a nivel personal).
Así mismo me he entretenido con varios reportajes sobre los estudios realizados para con la ECM y los recuerdos o cambios de comportamiento sufridos por transplantados que adquieren gustos o recuerdos que no eran los suyos y que coincidían con las del donante, habiéndose comprobado ello con investigaciones posteriores (muchas veces el trasplantado a recurrido a su médico al notar estas anomalías y al consultar con la familia del donante han comprobado que sus nuevos gustos coincidían con él), en ambas investigaciones llevadas siempre por médicos, psicólogos y psiquiatras siempre se plantean varias posibilidades más o menos ortodoxas, pero que en muchos casos no cuantificables ya que hablamos del terreno del alma o la conciencia, los casos están ahí, a los pacientes les ocurre algo y aunque por ejemplo en la ECM hay muchas explicaciones médicas que pueden justificar un gran número de ellas por ejemplo las experiencias compartidas con acompañantes dan que pensar. En el caso de los trasplantados llegamos a plantearnos, ¿donde esta la conciencia (alma)? o, ¿si existe y que es la memoria genética?, ¿se almacenan recuerdos en cada célula o en órganos muy importantes aparte de en el cerebro?, ¿la conciencia es no local?, por desgracia sólo son hipótesis indemostrables empíricamente porque al día de hoy no se puede ubicar la conciencia, confirmar la existencia del alma ni asegurar que la memoria resida sólo en el cerebro, lo cual no creo que quite importancia para mantener un estudio serio y seguirlos desarrollando, cuyos resultados pueden ser muy interesantes para conocer nuestra psique y quien sabe si dar con la puerta a nuestra conciencia.
Por otro lado y relacionado con estas temática, una entrevista al Doctor Raymond Moody, Doctor en Filosofía y Psiquiatría, Licenciado en Historia Antigua, Doctor Emérito de Psicología en la Universidad de Carrolton (Georgia) y de Estudios de la Conciencia en la Universidad de Nevada. Me dejo un sabor controbertido, el escritor del best seller “Vida Después de la Vida” es tajando en algunas de sus contestaciones atestiguando que no es un “alucinado” y que no ha dicho todas las cosas que se supone que ha dicho, así podemos leer.
Respecto a su obra: “.. en su insaciable búsqueda de beneficios, los editores persiguen siempre obsesivamente el sensacionalismo. Durante mucho años mis libros, víctimas de esa obsesión, han sido tan manipulados y tergiverados que, muchas veces ni siquiera me reconozco en ellos. Por eso me he visto obligado a sacar a la opinión pública todos los pensamientos que los editores comerciales habían recortado de mis libros, sin importarles que con ello deformaban su mensaje y mancillaban su imagen. .. ..Esto ha sido una fuente constante de disgusto para mi. Semejante sensacionalismos tal vez ayude a vender, pero arruina la credibilidad del autor. Y mientras los editores se llenaban los bolsillos con las ventas, yo tenía que contestar a los críticos que me hacían las mismas preguntas que yo ya había anticipado y resuelto en los párrafos que los editores habían descartado.”
Respecto a los Parapsicólogos: “.. no son más que pseudocientíficos, es decir, que se basan en una metodología y en unas permisas que ellos consideran científicas, pero que no lo son en absoluto. No pretendo con eso tildarlos de deshonestos. La mayoría son tan sinceros como ingenuos, y optimistas. Yo los clasifico en la misma categoría que a los rapsodas, a los soñadores y a los recolectores de lana. Tiene cualidades que los hacen muy “queribles”, pero sus asunciones básicas están completamente equivocadas.”
Respecto a los Escépticos: “El escepticismo es un término de gran dignidad que ocupa un lugar distinguido en la Historia. .. .. , pero no tiene nada que ver con el travestismo de algunos “científicos” fanáticos que se autoproclaman escépticos para denostar irracionalmente todo lo que no se ajuste su rígida fe. Para mí, el escepticismo es una actitud filosófica y no una beligerancia sectaria. Estos “escépticos” sedicentes no son escépticos en absoluto, sino ideólogos que piensan que están en posesión de la verdad absoluta. La ideología que profesan es el cientifismo, la creencia de que los métodos y asunciones de las ciencias naturales son los únicos adecuados para obtener el conocimiento. Con su actitud y fanatismo van camino de convertir la ciencia en una especie de religión. Lo que más me llama la atención de ellos.. .., muestran un insaciable afán de protagonismo. Siempre se están quejando de la poca atención que les prestan los medios de comunicación, teniendo en cuenta lo importante que ellos piensan que es su mensaje.”
Respeto a la Fenomenología extraña: “Mi postura es la del intelectual que no tiene prejuicios, simplemente curioso, que no se siente impelido a tener que aportar una hipótesis o una explicación científica para cada fenómeno aparente. La ciencia tiene muchas limitaciones y carece de herramientas para investigar ciertos campos como la consciencia humana, por ejemplo. Me parece que la única opción viable para cualquiera que desee asomarse al mundo de los fenómenos inexplicables reside en alejarse de toda confrontación con cualquiera de los tres grupos de fanáticos en litigio: parapsicólogos, escépticos y fundamentalistas religiosos. .. .. no se puede caer tampoco en la trampa saducea de tener que aceptar, al menos como posible, todo aquello cuya falsedad no pueda demostrarse..”
..Los enigmas de lo paranormal (si existe o no la percepción extrasensorial, le precognición, le telekinesis, la vida después de la muerte, etc..) son cuestiones mal formuladas sobre temas que han ocupado a los pensadores de los últimos veinte siglos. El reduccionnismo que la parapsicología hace de estos asuntos, que considera simples fenómenos sin resolver, oculta en realidad complejas cuestiones epistemológicas.
Para saber más.
http://es.wikipedia.org/wiki/Raymond_Moody
http://m.ilustradordigital.es/index.php/el-cobertizo/60-el-cobertizo/5338-raymond-moody-y-las-experiencias-de-muerte-compartida.html
Estoy de acuerdo con la mayoría de afirmaciones que hace Moody, habiendo sido además compartidas en algún debate que he seguido por otros medios tanto por el bando creyente, como por el escéptico, el radicalismo no lleva a ningún lado y ambos bando normalmente se aferran a sus permisas negando las contrarias sin tenerlas mínimamente en cuenta en eternas batallas de ego. Lo cierto es que me planteo desde hace mucho que este tipo de temáticas necesitan otro enfoque.
Así bien, lo primero, como digo al principio del artículo, es que haya un respeto para aquél que intenta seguir una metodología concreta y aporta alguna serie de datos contrastados que quizás no verifiquen a que se debe un fenómeno concreto, pero si confirman que el fenómeno ocurre. Recordemos que muchos descubrimientos importantes de la ciencia se han debido gracias a estudios sobre cosas que no encajaban en las teorías de la época y que científicos concretos aventuraron hipótesis ridiculizadas por los estamentos académicos oficiales de la época porque contradecían lo pactado en esos momentos como oficial y real, siendo la fe de estos y de los seguidores en su trabajo lo que les dio la razón años e incluso siglos después, cuando la tecnología ha permitido corroborarlas. Para esto, como digo también, hay que separar a charlatanes o enajenados de gente con buena formación que no aseguran nada a “ciencia cierta”, sino que dan otras posibilidades plausibles respaldadas por sus estudios y trabajos.
Otra cosa que también veo necesaria es el desecho de la llamada “teoría del residuo”, el decir que algo es posible porque aunque el 98 % es explicables un 2% no, me parece hoy en día patético y falto de argumento (si lo queremos usar como razón de peso), estadísticamente creo que es lógico que se den estos porcentajes y mientras que no se justifique ese 2% con una razón tangible no se puede dar credibilidad al hecho aunque si deja abiertas las puestas a su estudio. Sería ridículo que un medicamento que cura en un 98 % de los casos fuese puesto en duda e igualmente que sería ridículo recomendar otro que falla en el mismo % por que lo mismo a ti te cura. Si se quiere tener argumentos sobre una postura hay que ser más ambicioso.
También creo que el “Método Científico” es aplicable a prácticamente todo lo que conocemos, pero hay que tener en cuenta cuales son sus limitaciones o “errores”. Lo primero es que, HAY QUE TENER MUY CLARO QUE PREGUNTARLE, porque una pregunta errónea a la hora de plantear el estudio dará resultados erróneos por muy bien que se aplique el método. Por otro lado el método es neutro, pero no así las personas que los utilizan, prejuicios, presiones e intereses pueden viciar también los resultados de cualquier estudio y la historia de la ciencia está llena de casos donde se han retrasados estudios o silenciado por intereses a veces ajenos a la misma ciencia. Por último, está muy limitado por le tecnología disponible en cada momento, lo que hoy no es cuantificable, mañana puede que si, lo que sobre hoy sólo puedes teorizar mañana puedes corroborar, sin que por ello se falte al rigor en lo expuesto en cada momento.
Muchas veces en lo parapsicológico o paranormal, partimos de un hecho al que definimos de manera concreta queriendo justificar con métodos de deducción ( o más científicos) esa permisa ya impuesta desde el principio y creo que quizás es una de cosa de las que fallan. Este nuevo enfoque sería por ejemplo, en vez de estudiar las “Apariciones Marianas”, “Apariciones de Fantasmas”, “Apariciones OVNI o de Extraterrestres”, “Apariciones de Seres o Monstruos”, “Apariciones de personas o cosas fuera del su tiempo”, etc.. cada una de manera independiente y dando casi por sentado que están influenciados por factores determinados quizás lo que habría que estudiar seria “LAS APARICIONES” sin hacer distinciones, desde cero y sin permisas e ir viendo porqué una persona puede ver algo que no debería ver descartando primero problemas de percepción o médicos y a partir de ahí ir realizando propuestas, porque visto de manera global, en realidad comparten gran cantidad de paralelismo y similitudes siendo posible que todas sean un mismo fenómeno diferenciado por la carga cultural, tradicional y otros factores inherentes al testigo que identifica cada caso según sus conocimientos. He aquí que radica lo que dije en el párrafo anterior, preguntarle correctamente al Método Científico da resultados correctos y quizás llevamos mucho tiempo realizando preguntas incorrectas. No entiendo que alguien crea a pies juntillas en fantasma y niegue cualquier posibilidad de que existan extraterrestres por ejemplo.
Como persona a la que le gustan estos temas, me alegra de que de vez en cuando se oigan voces (desde ambos bandos) para algo que más que atacar al contrario, planteando opciones positivas en el avance del estudio de estos fenómenos, siendo también autocríticos con la postura propia. Ojala cada vez escuchemos más tertulias sobre fondo y menos sobre forma, eliminemos prejuicios preconcebidos y recordemos que la Ciencia o la Paraciencia y sus métodos son eso, herramientas, que por si solas no son más correctas ni incorrectas, somos los que las usamos los que hacemos que sean honestas, estrictas, coherentes, serias o inútiles, falsarias y reprobables, un uso leal y franco confirmará sin dudas su utilidad o no.
Un post muy interesante, aunque extenso, no estaría mal que lo enlazarás al blog de la tertulia como me comentaste. Un saludo desde la oscuridad.
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